Es una de las tres iglesias más antigua de Santo Domingo, construida en el segundo cuarto del siglo 16
A propósito de celebrarse el pasado 24 de septiembre, la fiesta de la patrona de los dominicanos, virgen de las Mercedes, hoy les contamos sobre la historia de la iglesia que lleva su nombre. Este diario obtuvo la cronología de los datos históricos de este simbólico monumento de nuestro patrimonio cultural, facilitado por el arquitecto Manuel S. Gautier en los años 70, los cuales narramos a continuación…
La iglesia de Nuestra Señora de las Mercedes, una hermosa estructura del siglo XVI, era conocida en tiempos de la colonia como la Iglesia de la Madre de Dios. Su construcción fue iniciada en 1527 y finalizada en 1555, es decir, que tardó aproximadamente 28 años en construirse. El arquitecto Rodrigo de Liendo y fue el encargado de llevar a cabo su edificación.
Recibió la invitación por parte de los mercedarios desde España hacia Santo Domingo. Este templo fue levantado con una sola nave abovedada, con un ábside ochavado, un coro alto y capillas laterales entre los contrafuertes. Al mismo tiempo que se construía, se edificaba su monasterio, terminado entre los años 1548-1549. Las edificaciones de Las Mercedes se vieron afectadas por el saqueo o intervención de Francis Drake en 1586 a la ciudad de Santo Domingo, antes llamada capital de la colonia española.
Entre 1591 y 1599, un ciclón le produjo una hendidura a la puerta principal de la iglesia, el cual provocó que cayera la piedra del cimborrio. En 1611 la Real Audiencia informó que las bóvedas amenazaban con caerse y sumándose a este hecho, en 1615 un terremoto dañó el coro alto y el arco toral del templo, y en 1628 otro fenómeno atmosférico afectó su techo.
Producto de esos daños, en 1635 se realizaron reparaciones en las bóvedas del lado oeste y se construyeron los arcos de medio punto y un nuevo frontis en el lado Oeste. Estas obras estuvieron a cargo del maestro Pedro Portillo. Un nuevo terremoto azotó Las Mercedes, entre 1672-1673, esta vez resultó afectado el convento y la torre Sur sobre el claustro; el maestro Pedro de la Rosa se encargó de los trabajos, y construyó la concha estriada en el ábside ochavado, el crucero de la capilla mayor y tres capillas laterales que habían sido derribadas. Además, levantó la torre norte. Para el año 1734 el templo fue consagrado nuevamente y se amplió la sacristía.
Un acto histórico fue la entrega de las ruinas del convento de las Mercedes, que resultó parcialmente destruido en 1751, a causa de un terremoto, a la Logia Cuna de América, en 1859. Quizás, no sabemos, pero puede que este haya sido el único caso de unión de la Iglesia Católica y una Logia Masónica al compartir la misma propiedad de un complejo religioso, como era el de las Mercedes, constituido por la iglesia, la capilla de la Tercera Orden y el Convento. El monasterio fue objeto de reparaciones por parte de sus nuevos propietarios. El doctor Adolfo Alejandro Nouel, mejor conocido como monseñor Nouel, adecentó la iglesia en 1886.
A medida que transcurrían los años, la iglesia se iba modernizando y adquiriendo nuevos atractivos, uno de ellos fue el alumbrado eléctrico que se le instaló en los 1911-1913. Así también en 1912 se sustituyó el piso de ladrillo que tenía por piso de mármol, y entre los años 1913 y 1917 se le colocó a sus paredes zócalo de azulejos sevillanos.
Una capilla auxiliar, cercana a la iglesia de las Mercedes, llamada de la Soledad fue restaurada en 1942 para ser sede de la Academia de la Historia, hoy Academia Dominicana de la Historia, entidad creada con el “objetivo primordial de conocer y estudiar el pasado en general, y principalmente el de la nación dominicana”. En 1950, la Logia Cuna de América construyó un patio español, en el claustro del convento.
Corría el 1970, cuando la Oficina de Patrimonio Cultural (OPC) inició unos trabajos de restauración del templo, respetando su forma y diseño original, agregándole los elementos que existían en su época. En la primera reparación que se le hizo en junio del 1970, se descubrió que su bóveda era de ladrillo, en agosto de ese mismo, fue descubierta la parte norte del claustro del convento de la iglesia; hallazgo de mucha importancia, ya que se trataba del único claustro conservado de la época colonial. En el tercer procedimiento efectuado en noviembre de 1974, se publicó en este diario que fueron encontradas en el piso del coro del templo una colección de cerámicas “que enriquecía la colección de mayólica del período colonial”. Este templo está ubicado en la calle las Mercedes, No. 10210, de la Zona Colonial, de Santo Domingo, República Dominicana.