«La conducta de nuestro pueblo y el sentido cívico que se mostró con ocasión de las elecciones del domingo pasado fueron ejemplares. Por esta razón, nuestro pesar es aún mayor por lo sucedido». Los obispos de la República Dominicana se han manifestado inmediatamente después de que se suspendieran las elecciones municipales en el país debido  a fallos técnicos en el sistema de voto automatizado.

Las próximas elecciones extraordinarias serán el 15 de marzo

Es la primera vez que se suspende el resultado de las elecciones desde que el país dejó la dictadura en 1962. El fallo en el sistema se produjo en gran parte de los colegios electorales donde la votación se realizó electrónicamente y por esta razón el Consejo Central Electoral (JCE) canceló la sesión llamando nuevamente a los ciudadanos en las urnas el 15 de marzo. En estas elecciones extraordinarias, los votantes tendrán que marcar su sufragio a mano.

Un fallo que ensucia la tradición democrática del país

“Los dominicanos han demostrado su sentido de responsabilidad desplazándose desde lugares muy lejanos para cumplir con su deber” escriben los prelados en un informe oficial publicado en la web de la Conferencia Episcopal Dominicana y consideran que este hecho “empaña la larga tradición democrática de su país». En la nota consideran que “es un momento oportuno para que tanto las autoridades competentes, como líderes políticos, se muestren a la altura de las circunstancias” y piden urgentemente “favorecer un clima de confianza que propicie el diálogo para la búsqueda de consenso, a fin de dar cumplimiento a lo previsto por la Constitución y las leyes”.

Finalmente, destaca su llamamiento al pueblo y especialmente a los líderes políticos para “mantener la calma y la sensatez”, a la vez que exhortan a la Junta Central Electoral a “clarificar, en un tiempo prudente, lo sucedido”.