Queridos hermanos de la provincia de San Cristóbal y de toda la diócesis de Baní:

Como todos sabemos, ayer ocurrió una explosión en una empresa de San Cristóbal que se convirtió en una tragedia para la provincia y para el país, con más de una decena de fallecidos, de sesenta heridos y once desaparecidos en el momento de escribir estas líneas.

El pueblo dominicano se siente adolorido, pero nuestra diócesis está especialmente de duelo porque los afectados son hermanos con los que compartimos el territorio de servicio pastoral. Para nuestra Iglesia, todas las personas son hijas del buen Padre Dios, Él nos invita a ocuparnos, especialmente, de los afligidos, de quienes lloran y esperan consuelo.

Por tal motivo, solicitamos a todas las parroquias de nuestra diócesis que en las celebraciones eucarísticas se dediquen sufragios por las almas que han partido en esta tragedia, a orar por sus familiares, por los heridos y, en general, por todos los que de una u otra manera han sido afectados. Igualmente invitamos a realizar gestos oportunos de solidaridad con todo el pueblo de San Cristóbal que ha sido estremecido directamente.

En el día de mañana, Día de la Restauración, celebraremos una misa en la Catedral de Nuestra Señora de Regla en Baní, a las 9:00 am, y en la Parroquia Nuestra Señora de la Consolación en San Cristóbal, a las 10:00 am, con la presencia del presidente de la República, el Lic. Luis Abinader Corona, presentando a las víctimas y el acontecimiento trágico en sí.

Como Iglesia local, estamos coordinando esfuerzos para ofrecer acompañamiento espiritual y sicológico a quienes lo necesiten y soliciten. Avisaremos oportunamente los lugares donde se prestarán estos servicios humanitarios.

Que el Señor dé el descanso eterno a todos los fallecidos trágicamente y que brille para ellos la luz perpetua.

Que en este día de la Asunción, María, madre de los creyentes cristianos, nos consuele a todos con su dulzura. Enviamos un abrazo de paz y de todo corazón, especialmente a todos los familiares y amigos afectados.

Dios bendiga a todos, con mis oraciones,

Mons. Víctor E. Masalles

Obispo de la diócesis de Baní