La Red Eclesial Panamazónica fue galardonada en Roma por su incansable trabajo en defensa de la naturaleza y los derechos humanos en la región amazónica. Monseñor Rafael Cob destacó que este reconocimiento fortalece su misión de proteger la vida en la Amazonía.
Sebastián Sansón Ferrari – Ciudad del Vaticano
La Red Eclesial Panamazónica (REPAM) recibió con esperanza y alegría el Premio por el compromiso con la ecología integral el viernes 30 de mayo de 2025, en una ceremonia celebrada en el Auditorio Antonianum de Roma. Este galardón fue otorgado en el marco de las celebraciones del octavo centenario del Cántico de las Criaturas de San Francisco de Asís y reconoce el trabajo incansable de la REPAM en la defensa de la vida y la naturaleza en la región amazónica, una de las más afectadas por la crisis climática y la explotación de sus recursos naturales.
Un galardón a la defensa de la vida en la Panamazonía
El evento, presidido por el Ministro General de la Orden de los Frailes Menores, fr. Massimo Fusarelli, también reconoció a otras figuras y organizaciones comprometidas con la ecología integral, como el Patriarca Ecuménico de Constantinopla, Bartolomé I, el teólogo brasileño Leonardo Boff y el Movimiento Laudato Si’. Todos ellos fueron destacados por su labor en la defensa del medio ambiente y la promoción de la justicia ecológica.
En una entrevista con los medios vaticanos, Monseñor Rafael Cob, presidente de la REPAM y vicario apostólico de Puyo (Ecuador), expresó que este premio es un reconocimiento al trabajo constante de la red en la defensa de los pueblos amazónicos. Según Monseñor Cob, estos pueblos y sus tradiciones se enfrentan a serias amenazas debido al cambio climático y la devastación ambiental. “Este galardón nos llena de alegría, pero también nos impulsa a seguir luchando por la vida de las comunidades amazónicas, por la protección de la naturaleza y por los derechos humanos de los pueblos que habitan esta región”, afirmó.
Diez años de trabajo y compromiso territorial
La REPAM, que agrupa a nueve países de la región amazónica—Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana Británica, Guyana Francesa, Perú, Surinam y Venezuela—ha trabajado estrechamente con las comunidades locales para promover la justicia social y la sostenibilidad ambiental. En sus diez años de existencia, la red ha sido clave en la defensa de los derechos de los pueblos indígenas, la lucha contra la deforestación y la promoción de alternativas sostenibles en la región.
Monseñor Cob destacó que uno de los mayores logros de la REPAM ha sido integrar la ecología integral como una prioridad en la misión de la Iglesia en la Amazonía. “Como red eclesial, hemos aprendido a escuchar a los pueblos, a valorar su sabiduría ancestral y a unirnos en un esfuerzo común para proteger la Amazonía, que es vital no solo para la región, sino para todo el planeta”, explicó.
Laudato Si’ y la ecología integral como guía
Este premio también subraya la relevancia de la encíclica Laudato si’, del Papa Francisco, que ha sido una fuente constante de inspiración para la REPAM. Durante sus diez años de trabajo, la red ha adoptado los principios de la ecología integral propuestos por el Papa, buscando siempre integrar el cuidado de la creación con la justicia social.
El futuro de la REPAM en la Amazonía
Este reconocimiento no solo celebra los logros del pasado, sino que también refuerza el compromiso de la red con los desafíos que aún enfrenta la región amazónica. Monseñor Cob reiteró la importancia de seguir trabajando para implementar las conclusiones del Sínodo Amazónico, un evento clave que ha dado lugar a nuevas iniciativas en la región.
“Uno de nuestros sueños es que el trabajo realizado continúe dando frutos y que las voces de los pueblos amazónicos sean escuchadas a nivel global”, explicó. “Nuestro desafío es mantenernos unidos, fortalecer nuestros lazos y seguir defendiendo los derechos de los pueblos amazónicos, mientras trabajamos por un futuro más justo para todos”.
Un camino de esperanza y renovación
Este galardón, entregado en un evento que también celebró la figura de San Francisco de Asís y su llamado a la fraternidad con la creación, simboliza un compromiso renovado con la ecología integral. En palabras de Monseñor Cob: “La esperanza nos anima a seguir adelante, porque sabemos que la lucha por la vida y la naturaleza es una misión compartida por todos los pueblos del mundo”.
La REPAM continuará su trabajo en la región amazónica con la convicción de que, a través de la unidad y la cooperación, es posible transformar la realidad de los pueblos amazónicos y proteger la invaluable biodiversidad de la región. Este premio es solo un paso más en un largo camino hacia la justicia ecológica y social.