León XIV: “En el servicio diario a los más vulnerables florece la santidad de vida”

El Papa destacó la fe, esperanza y caridad de los siete nuevos santos canonizados, entre ellos el médico venezolano José Gregorio Hernández y la religiosa Carmen Rendiles.

by Jose Medrano
0 comments

Al día siguiente de la canonización de los siete nuevos santos, el Papa León XIV se reunió con los peregrinos que acudieron a Roma para celebrar este acontecimiento de gracia, exhortándolos a seguir el ejemplo de los nuevos canonizados, a quienes definió como “signos luminosos de esperanza” para el mundo de hoy.

Durante su discurso, el Pontífice agradeció la presencia de cardenales, obispos, superiores religiosos y autoridades civiles, y recordó que “la comunión de la Iglesia involucra a todos los fieles a través del espacio y el tiempo, en todas las lenguas y culturas, uniéndonos como Pueblo de Dios, Cuerpo de Cristo y Templo del Espíritu Santo”.

Ignacio Maloyan: testimonio de fe y reconciliación

El Papa se refirió con emoción al obispo mártir San Ignacio Maloyan, destacando su firmeza al no renunciar a la fe en tiempos de persecución. “Fue un pastor según el corazón de Cristo, que no abandonó a su rebaño, sino que lo fortaleció en la fe”, afirmó.
Recordó además el valor del pueblo armenio, “que talla la cruz en piedra como signo de su fe firme y sólida”, pidiendo que la intercesión del nuevo santo “renueve el fervor de los creyentes y traiga frutos de reconciliación y paz para todos”.

Pedro To Rot: fidelidad al Evangelio

Sobre San Pedro To Rot, catequista y mártir de Papúa Nueva Guinea, el Papa elogió su testimonio heroico frente a la persecución. “Aunque era un catequista común, demostró una valentía extraordinaria al continuar su apostolado en secreto”, recordó.
El Pontífice citó sus propias palabras pronunciadas en medio de la hostilidad: “Dios, nuestro Padre, está con nosotros y nos cuida. Debemos orar y pedirle que permanezca siempre con nosotros”. León XIV exhortó a los fieles a seguir su ejemplo “defendiendo las verdades de la fe, incluso a costa del sacrificio personal”.

José Gregorio Hernández y Carmen Rendiles: orgullo de Venezuela

El Papa también dedicó una parte importante de su mensaje a San José Gregorio Hernández y Santa Carmen Rendiles, “dos hijos amados de la tierra venezolana”.
Citó la carta reciente del episcopado de Venezuela, que invitaba a los fieles a unirse en torno al ejemplo de estos santos. León XIV destacó las virtudes que los caracterizaron: la fe que transforma la vida ordinaria, la esperanza que no se agota en las metas efímeras, y la caridad que se manifiesta en el servicio a los enfermos y pobres.
“El verdadero sentido de la vida —dijo— se construye sirviendo, amando y reconociendo en el otro a un hermano con quien compartir el camino de la existencia”.

María Troncatti: caridad que sana y evangeliza

El Papa recordó con gratitud a Santa María Troncatti, religiosa salesiana y misionera en Ecuador, quien “combinó su experiencia médica con su pasión por Cristo, cuidando el cuerpo y el alma de los más necesitados”.
Su ejemplo —añadió— es una invitación a “una caridad que no se rinde ante las dificultades, sino que las convierte en oportunidades para el servicio generoso y total”.

Vincenza Maria Poloni: misericordia encarnada

De Santa Vincenza Maria Poloni, fundadora de las Hermanas de la Misericordia, León XIV resaltó su “profunda espiritualidad eucarística y devoción mariana”, que la llevaron a consagrar su vida al servicio de los enfermos y marginados.
“En el servicio cotidiano a los más vulnerables florece la santidad de vida”, afirmó el Papa.

Bartolo Longo: la fuerza transformadora del Rosario

Finalmente, el Pontífice evocó la figura de San Bartolo Longo, quien pasó de una vida alejada de Dios a convertirse en apóstol del Rosario y benefactor de los huérfanos y pobres.
“Su conversión es un signo de la misericordia de Dios que transforma el corazón y lo impulsa a las obras de caridad”, expresó León XIV.
El Papa recomendó con fervor la oración del Rosario: “Contemplando los misterios de Cristo a través de la mirada de María, asimilamos cada día el Evangelio y aprendemos a vivirlo”.

Llamado final

Al concluir, León XIV animó a los peregrinos a regresar a sus países “con el corazón lleno de gratitud y con el ardiente deseo de imitar a los nuevos santos”.
“Que su intercesión los acompañe y su ejemplo los inspire”, dijo el Papa antes de impartir su bendición apostólica.

Related Posts

Leave a Comment