Color: Blanco
Nuestra Iglesia, también celebra la 54a Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales con el lema: “Para que puedas contar y grabar en la memoria (cf. Ex 10,2) La vida se hace historia”
Santos:
Lecturas del día:
Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 1, 1-11
En mi primer libro, querido Teófilo, escribí de todo lo que Jesús fue
haciendo y enseñando hasta el día en que dio instrucciones a los apóstoles,
que había escogido, movido por el Espíritu Santo, y ascendió al cielo. Se les
presentó después de su pasión, dándoles numerosas pruebas de que estaba
vivo, y, apareciéndoseles durante cuarenta días, les habló del reino de Dios.
Una vez que comían juntos, les recomendó: -«No se alejen de
Jerusalén; aguarden que se cumpla la promesa de mi Padre, de la que yo
les he hablado. Juan bautizó con agua, dentro de pocos días ustedes serán
bautizados con Espíritu Santo.» Ellos lo rodearon preguntándole: -«Señor,
¿es ahora cuando vas a restaurar el reino de Israel?»
Jesús contestó: -«No les toca a ustedes conocer los tiempos y las
fechas que el Padre ha establecido con su autoridad. Cuando el Espíritu
Santo descienda sobre ustedes, recibirán fuerza para ser mis testigos en
Jerusalén, en toda Judea, en Samaria y hasta los confines del mundo.»
Dicho esto, lo vieron levantarse, hasta que una nube se lo quitó de
la vista. Mientras miraban fijos al cielo, viéndole irse, se les presentaron
dos hombres vestidos de blanco, que les dijeron: -«Galileos, ¿qué hacen
ustedes ahí plantados mirando al cielo? El mismo Jesús que les ha dejado
para subir al cielo volverá como le han visto marcharse». Palabra de Dios.
Salmo Responsorial: 46,2-3.6-7.8-9
R/. Dios asciende entre aclamaciones; el Señor, al son de trompetas.
Pueblos todos batan palmas, aclamen a Dios con gritos de júbilo; porque
el Señor es sublime y terrible, emperador de toda la tierra. R/.
Dios asciende entre aclamaciones; el Señor, al son de trompetas; toquen
para Dios, toquen, toquen para nuestro Rey, toquen. R/.
Porque Dios es el rey del mundo; toquen con maestría. Dios reina sobre
las naciones, Dios se sienta en su trono sagrado. R/.
Segunda Lectura: Efesios 1, 17-23
Alabemos y adoremos a Cristo Resucitado que es ahora el Señor
glorioso, cabeza de la Iglesia, y que está sentado a la derecha del Padre.
Pidamos el Espíritu de Sabiduría para conocer y penetrar en este misterio
del Padre y de su Hijo. Escuchemos.
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios 1, 17-23
Hermanos: Que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de la
gloria, les dé espíritu de sabiduría y revelación para conocerlo. Ilumine los
ojos de su corazón, para que comprendan cuál es la esperanza a la que les llama, cuál la riqueza de gloria que da en herencia a los santos, y cuál la extraordinaria grandeza de su poder para nosotros, los que creemos, según la eficacia de su fuerza poderosa, que desplegó en Cristo, resucitándolo de entre los muertos y sentándolo a su derecha en el cielo, por encima de todo principado, potestad, fuerza y dominación, y por encima de todo nombre conocido, no sólo en este mundo, sino en el futuro.
Y todo lo puso bajo sus pies, y lo dio a la Iglesia como cabeza, sobre todo.
Ella es su cuerpo, plenitud del que lo acaba todo en todos. Palabra de Dios.
Aleluya Mt 28, 19. 20
Vayan y hagan discípulos de todos los pueblos -dice el Señor-;
Yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo.
Evangelio: Mateo 28, 16-20
Jesús ha partido físicamente, pero nos ha dejado una gran misión:
Llevar a todos el mensaje de la Buena Nueva de salvación. Él permanece con nosotros y nos acompaña en esta misión a través de su Espíritu Santo.
Y para realizarla nos podemos valer de los medios de comunicación social, que nos han servido maravillosamente en este tiempo de cuarentena. Nos ponemos de pie y después del canto, escuchemos.
Lectura del santo evangelio según san Mateo 28, 16-20
En aquel tiempo, los once discípulos se fueron a Galilea, al monte que
Jesús les había indicado. Al verlo, ellos se postraron, pero algunos vacilaban.
Acercándose a ellos, Jesús les dijo:
-«Se me ha dado pleno poder en el cielo y en la tierra. Vayan y hagan
discípulos de todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo; y enseñándoles a guardar todo lo que les he mandado. Y sepan que yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo». Palabra del Señor.