El sábado 14 de junio, el Cardenal Pierbattista Pizzaballa, Patriarca Latino de Jerusalén, ordenó a tres nuevos sacerdotes formados en el Seminario Redemptoris Mater de Galilea, del Camino Neocatecumenal, un signo de esperanza ante la guerra en Tierra Santa.
La Misa de ordenación, señala el sitio web del Patriarcado, se celebró en el Centro Internacional Domus Galilaeae, a orillas del Mar de Galilea, un lugar importante del Camino Neocatecumenal.
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Los tres nuevos sacerdotes son John Oscar Nuñez, de Filipinas; Giacomo Pagliariccia, de Italia; y Lucas Solbach, de Francia, acompañados por algunos fieles de las parroquias donde servían como diáconos, y sus familias, que pudieron llegar a Galilea antes de que recrudeciera la guerra entre Israel e Irán.
Como concelebrantes estuvieron Mons. Rafiq Nahra, Vicario Patriarcal de Galilea; Mons. William Shomali, Vicario General del Patriarcado de Jerusalén; y los obispos eméritos Giacinto-Boulos Marcuzzo e Ilario Antoniazzi, además de sacerdotes y formadores del Seminario Redemptoris Mater de Galilea.
Llamados a ser “el corazón de Cristo en la Iglesia” en Tierra Santa
En su homilía, el Patriarca habló sobre el profundo significado del “testimonio” cristiano, que en los primeros siglos de la Iglesia Católica no era sólo ser coherente sino, con frecuencia, ofrecer la propia vida.
En el mundo actual, en particular en Oriente Medio, marcado por la guerra actual, la palabra testimonio recuerda lo mismo de entonces, continuó el purpurado.
“El ministerio sacerdotal no es suyo, no les pertenece. Es una continuación del ministerio mismo de Cristo. Están llamados a ser su rostro, sus manos, sus pies y su corazón en la vida de la Iglesia”, dijo el Cardenal Pizzaballa a los nuevos sacerdotes.
La celebración, con un fuerte acento de acción de gracias por los nuevos presbíteros, se desarrolló en un ambiente de profunda alegría, pero también de oración por la paz en Tierra Santa, señala el Patriarcado Latino de Jerusalén.