Un ataque terrorista del Estado Islámico en una iglesia de Damasco, la capital de Siria, ha dejado un total de 25 víctimas y más de 60 heridos.
En la noche del domingo 22 de junio, un terrorista del Estado Islámico (ISIS) ingresó en la iglesia ortodoxa de San Elías, en Dweil’a, a las afueras de Damasco, y abrió fuego contra los fieles que asistían a la Misa en la Solemnidad del Corpus Christi.
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⚡️Ministerio del Interior sirio: Un suicida afiliado a la organización terrorista (Da-esh) entró en la iglesia de San Elías en el barrio de Douweila en Damasco, abrió fuego y luego se inmoló con un chaleco explosivo.
— SANA en Español (@Agencia_Sana) June 22, 2025
Según informaron las autoridades, el terrorista islámico se inmoló con un cinturón explosivo tras cometer el ataque. Según el Ministerio de Salud sirio, el atentado ha dejado 25 víctimas mortales y un total de 63 heridos.
El brutal atentado contra esta iglesia cristiana, el primero que se comete después de la caída del régimen de Asad en diciembre de 2024, ha dejado desgarradoras imágenes en las que se ve a los fieles en el suelo cubierto de sangre y gran parte de la iglesia en ruinas.
No hay justificación religiosa ni moral
Son numerosas las voces que se han alzado en contra de este ataque terrorista. En un comunicado publicado por el Patriarcado Latino de Jerusalén, la Asamblea de Ordinarios Católicos de Tierra Santa manifestó su “profunda repulsión” a este ataque, subrayando que “no hay justificación —religiosa, moral ni racional— para la masacre de inocentes, y menos aún en un espacio sagrado”.
“Tal violencia, bajo el pretexto de la fe, es una grave perversión de todo lo sagrado. Este es un acto de maldad atroz: un crimen contra la humanidad y un pecado ante Dios”, reiteraron.
Así, condenaron “enérgicamente este acto bárbaro”, rechazando “las ideologías que buscan justificar la violencia en nombre de la religión”.
“Instamos a las autoridades sirias a que adopten todas las medidas necesarias para garantizar la protección y la libertad de los cristianos en todo el país, para que puedan vivir en seguridad y contribuir plenamente a la vida de su patria”, se lee en el comunicado.
Oramos por el descanso de las almas de las víctimas
Por su parte, la presidente ejecutiva de Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), Regina Lynch, ha evidenciado su profunda tristeza por el mortífero atentado: “Nuestro corazón está con las víctimas, sus familias y toda la comunidad cristiana de Siria”, afirmó.
Asimismo, el Patriarcado Griego Ortodoxo de Antioquía y de todo Oriente, Juan X, lamentó que “la mano traicionera del mal ha golpeado”, cobrándose la vida de los hermanos “que han caído hoy como mártires durante la liturgia vespertina en la iglesia de San Elías”.
El Patriarcado instó a las autoridades “a que asuman toda la responsabilidad por lo que ha ocurrido y sigue ocurriendo en términos de violaciones de la santidad de las iglesias, y a que garanticen la protección de todos los ciudadanos”.
“Oramos por el descanso de las almas de los mártires, por la curación de los heridos y por el consuelo de nuestro pueblo. También afirmamos nuestra firmeza en la fe y, a través de esa firmeza, nuestro rechazo a todo miedo y terror. Pedimos a Cristo nuestro Dios que guíe la nave de nuestra salvación en medio de las tormentas de este mundo, Él que es bendito por siempre”, se lee en el mensaje difundido por ACN este lunes.
En esta línea, el Gobierno de Estados Unidos envió sus condolencias a las familias de las víctimas, afirmando que seguirán “apoyando al gobierno sirio para hacer frente a estos actos cobardes y a quienes buscan desestabilizar el país y la región”.